235. La fábula del “gancho ciego” que nos abrió los ojos a todos

ASÍ LA VEO YO - Año 10 No insistamos por el camino de querer tapar el sol con un dedo Por Juan Rubbini @JuanRubbini ........................ El encuentro de Diógenes con Alejandro Magno “Al oír hablar sobre Diógenes, Alejandro Magno quiso conocerlo. Así que un día en que el filósofo estaba acostado tomando el sol, Alejandro se paró ante él. “Diógenes se percató también de la presencia de aquel joven espléndido. Levantó la mano como comprobando que, efectivamente, el sol ya no se proyectaba sobre su cuerpo. Apartó la mano que se encontraba entre su rostro y el del extraño y se quedó mirándolo. “El joven se dio cuenta de que era su turno de hablar y pronunció: - "Mi nombre es Alejandro El Grande”. Pronunció esto último poniendo cierto énfasis enaltecedor que parecía más bien aprendido. - "Yo soy Diógenes el perro” “Hay quienes dicen que retó a Alejandro Magno con esta frase, pero es cierto también que en Corinto era conocido como Diógenes el perro. Alejandro Magno era conocido ...