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Mostrando entradas de julio, 2006

Si las AUC no regresan al monte ¿los ‘narcos’ ocuparán su lugar?

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La ley 975 no debe ocultarnos que la cuestión de fondo es política CHAMUYO (9) Por Juan Antonio Rubbini Melato www.lapazencolombia.blogspot.com juanrubbini@hotmail.com ¿A qué aspiran las FARC sino a convertirse en las fuerzas ‘paramilitares’ de Chávez? ¿Y a qué le apuntan las nuevas generaciones de ‘narcos’ sino a convertirse en dueños del conflicto armado? Frente a esto ¿quién podrá defender a la población civil si el Estado demora en la recuperación del terreno y del balón? Las masacres de las FARC en Riosucio y Unguía son la otra cara de la moneda que los nuevos socios del ‘conflicto’ exhibieron, a modo de ritual y bautismo de fuego, en Jamundí. Si el Gobierno no se pone las pilas, en vez de enterrar el ‘paramilitarismo’ tras la desmovilización de las AUC, abrirá cándidamente las puertas a los ‘coroneles salvadores de la patria’ que hallarán en Chávez su mentor y entre los vericuetos ‘neocomunistas’ del entorno FARC- PDA sus ‘padrinos’ ideológicos y sus embajadores ante el Estado co

Gobierno y AUC: ¿Proceso de Paz o Proceso de Kafka?

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Ley 975: ‘Aquí estoy y aquí me quedo’ CHAMUYO (8) Por Juan Antonio Rubbini Melato www.lapazencolombia.blogspot.com juanrubbini@hotmail.com La ley 975, más aún después de la sentencia de la Corte, levanta barreras infranqueables entre procesos de paz, acuerdos políticos de desmovilización y marco legal y constitucional. Se ha trancado la puerta de la solución política negociada tal como tradicionalmente la han entendido la izquierda y buena parte del país. FARC y ELN no negociarán bajo estas condiciones, sino acorralados por un descalabro militar insuperable. Solo se someterán a la ley 975 aquellas facciones disidentes o individuos que decidan desertar. Sin embargo, no nos engañemos: el texto reformado revela en lo sustancial más afinidades que diferencias entre el Gobierno y la Corte. Uribe sintoniza finalmente con EEUU y Europa en materia de paz. Si el proceso con las AUC requería seguridad jurídica ahora la tiene. La credibilidad internacional del proceso nunca ha estado tan alta. N

AUC, FARC, ELN y el Gran Acuerdo Nacional

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El dolor de todas las víctimas reclama los mismos derechos CHAMUYO (7) Por Juan Antonio Rubbini Melato www.lapazencolombia.blogspot.com juanrubbini@hotmail.com En el imaginario colectivo de la política y el conflicto armado se han visualizado tres parejas ‘virtuales’ a favor y en contra de las cuales se ha votado en 2006. Las de Álvaro Uribe y AUC, Carlos Gaviria y FARC, y Horacio Serpa y ELN. Quien votó por alguno de los tres candidatos no ignoró que también ‘votaba’ por la ‘llave’ que le resultaba atribuida. No inhibió su voto la asociación de ideas acerca del ‘compañero de llave’. Se invistió a los tres candidatos para que ejercieran su ‘representativa mediación’ respecto al actor armado ilegal que le resultaba más cercano o menos contrapuesto. A partir de aquí –si los ex candidatos asumen este ‘imaginario colectivo’ como un hecho político que les entrega un mandato y una responsabilidad- se entreabren espacios de convergencia donde es posible alcanzar durante este cuatrienio el Gra

Las AUC, las guerrillas y la piedra del Peñol

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Marxismo criollo: pocas ideas pero bien confusas CHAMUYO (6) Por Juan Antonio Rubbini Melato www.lapazencolombia.blogspot.com juanrubbini@hotmail.com Un antiguo jefe me solía decir que para ascender en la jerarquía de aquella empresa había que tener pocas ideas, pero eso sí, bien confusas. Agregaba esta perla: ¿para qué volver simple lo que con poco esfuerzo puede complicarse hasta el infinito? Entre políticos marxistas y guerrilleros marxistas nos han querido convencer que el país sería un ‘paraíso socialista’ si ellos accedieran al poder. Para lograrlo algunos marxistas se dedicaron a la política y otros partieron al monte. Unos apelaron a la fuerza de los argumentos y los otros a la fuerza de las armas. Ambos esperaban confluir un día en alguna insurrección popular, al calor de una barricada compartida, o en alguna solución política negociada que los acercara jubilosos a las mieles del poder. Es tan simple el razonamiento que resulta provocativo. Mejor oscurecerlo dirán algunos mar